En esta forma, dos grupos distintos de planetas ocupan lugares opuestos el uno al otro en la carta. Los grupos no tienen que tener un número igual de planetas, pero los diez planetas deben de estar en uno u otro de estos grupos. La gente con esta configuración generalmente busca el equilibrio. Sopesan todos los lados de la cuestión antes de tomar una decisión. A veces, esta configuración puede hacer que se tornen indecisos. Pero en una carta fuerte, hay una excelente perspectiva y una armonía que pueden hacerles conseguir algún tipo de logro excepcional. El escritor Ruyard Kipling tiene una carta en balancín.
domingo, 29 de abril de 2007
El balancín
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